la
salida a la cárcel fue una experiencia que quedara en nuestras mentes y en la
de los presos, cuando estuve en ese lugar supe que no es como todos pensamos
que es una cárcel: en la que sus trajes son naranjas y en cada patio hay un brabucón,
pues no es así porque las personas que están ahí dentro tienen la ilusión de
pronto regresar a casa y abrazar de nuevo a sus familiares y amigos, pero
tienen miedo de que por el error que una vez cometieron la sociedad los rechaze
y los vea como una "amenaza" pero mucha gente dice "si cometemos
un error tenemos una segunda oportunidad " entonces si la gente dice esto
porque no lo cumplen. si la misma sociedad y nosotros como seres humanos
sabemos perdonar podremos perdonar el error que los presos han cometido. así
que por mi parte los presos al igual que cualquier otro ser humano merecen otra
oportunidad y que sean perdonados y no juzgados. Esta experiencia me hizo
reflexionar sobre no juzgar sin saber. Cuando estuve en comunicación con los
presos me di cuenta que no son malos ni
agresivos como mucha gente lo cree si no que saben divertirse y reír como hace
tiempo no lo hacían así que es mejor saber antes de juzgar...
PAULA
SOFIA AVILA NITOLA 9a